EL RINCÓN DE FERNY

domingo, 24 de febrero de 2019

GUÍA RÁPIDA PARA DIFERENCIAR ESTILOS ARQUITECTÓNICOS EN IGLESIAS. LA EXPRESIÓN DE LA FE ATRAVÉS DEL ARTE

INTRODUCCIÓN

Las miles de iglesias repartidas por la geografía española son reflejo y máximo exponente de la historia de la arquitectura española desde el siglo IV hasta nuestros días. Durante muchos siglos la construcción de templos ha marcado la evolución tecnológica de la arquitectura. Ésta evolución ha dado lugar a diferentes técnicas y estilos a lo largo de la historia.

La mayoria de las iglesias tienen elementos de diferentes estilos, esto es principalmente debido a:

Reformas. Bien por necesidad o por gusto, cuando se realizaban reformas se solía aplicar el estilo contemporáneo a la reforma, en raras ocasiones se respetaba el diseño original.
Ampliaciones. En muchas ocasiones las obras se prolongaban por muchos años e incluso siglos. Se comenzaba con un diseño que iba actualizándose con las nuevas tendencias. En el caso de grandes templos, muchos obispos y nobles querían dejar su huella, construyendo nuevas capillas e instalaciones.
De esta manera, es muy común que cada iglesia tenga diferentes elementos construidos en diferentes estilos.

1. ASPECTO GLOBAL

Aunque en principio el aspecto global sería el principal elemento diferenciador, hay que tener en cuenta que en construcciones más modestas puede confundirnos puesto que las diferencias pueden ser mínimas.

2. ESTILOS-ARQUITECTONICOS-IGLESIAS-ASPECTO
Como norma general:

PRERROMÁNICO: Los muros soportan toda la carga, de modo que son muros gruesos y con pocas aberturas. Destaca la ausencia de argamasa. Baja altura.
ROMÁNICO: Al igual que el prerrománico, los muros son gruesos y con pocas aberturas. Los muros están reforzados con contrafuertes. Por regla general son construcciones de baja altura, aunque hay excepciones sobre todo en los campanarios.
MUDÉJAR: El ladrillo y la cerámica son los principales elementos utilizados, dándole un aspecto muy característico.
GÓTICO: La carga se distribuye en una estructura de columnas y arcos, de modo que los muros son más finos y se permiten más y mayores aberturas. Ésta estructura se refuerza con arcos arbotantes. Las construcciones góticas tienden a ser muy altas.
RENACENTISTA: Se introducen elementos de arquitectura clásica y timidamente formas redondeadas.
BARROCO: Combinación de espacios lineales y formas redondeadas complejas.

En cualquier caso, el aspecto depende en gran medida de los recursos empleados y la pericia del maestro. Las mayores diferencias se encuentran en las grandes construcciones, mientras que en construcciones más modestas las diferencias pueden ser mínimas.

3. PORTADA, FACHADA PRINCIPAL

PRERROMÁNICO: Arco de medio punto o de herradura en el caso del mozárabe.
ROMÁNICO: Portada escultórica. Para evitar el efecto “tunel”, el grosor del muro se adorna con arquivoltas concéntricas, llamadas arcos abocinados. Estos arcos se apoyan en los capiteles de las columnas, normalmente también decorados.
MUDÉJAR: Dependiendo de la época y localización se pueden dar diferentes formas, siempre en ladrillo y cerámica.
GÓTICO: También a base de arcos abocinados, pero de forma ojival.
RENACENTISTA: Tiende a desaparecer la forma ojival del gótico para volver al arco de medio punto, aunque ahora se pueden construir con diámetros mayores que en el románico. Dentro de las diferentes tendencias renacentistas destacan las portadas de estilo plateresco, de gran riqueza ornamental.
BARROCO: La combinación de líneas rectas y curvas dan lugar a diferentes formas. En general se utilizan columnas de gran tamaño y grandes pórticos abobedados.
NEOCLÁSICO: Grandes columnas culminadas por un gran frontón, generalmente de forma triangular. Ausencia de ornamentación.

4. ARCOS, VENTANAS Y BÓVEDAS

PRERROMÁNICO: Muy pocas ventanas y muy estrechas, en algunos casos son simplemente aspilleras. Los arcos son de herradura y de medio punto con poco diámetro. Bóvedas de cañón, bóvedas de arista y cúpulas de pequeñas dimensiones.
ROMÁNICO: Arco de medio punto, bóvedas de cañón y bóvedas de arista. En el periodo final del románico se comenzó a utilizar el arco ojival o apuntado. Para sujetar el gran peso de la bóveda de cañón los muros se refuerzan con contrafuertes. La escasez de ventanas da lugar a una luz muy tenue en el interior.
GÓTICO: Arco ojival y bóveda de crucería. Estos dos elementos consiguen aligerar el peso y repartirlo eficientemente a través de una estructura de pilares y nervios reforzados con arcos arbotantes. Éste sistema permite aumentar considerablemente la altura de la construcción al tiempo que se pueden abrir grandes ventanales. Como consecuencia, los templos góticos son más altos, más ligeros y mucho más luminosos que sus antecesores.
RENACENTISTA: El renacimiento supone una ruptura con el gótico, si el gótico pretendía construir espacios a la medida de Dios, en el renacimiento se pretende crear espacios a la medida del hombre. Desaparece el arco ojival e impera la proporción y la matemática. Los nuevos conocimientos permiten utilizar sin problema arcos de medio punto, bóvedas de cañón y espectaculares cúpulas. Los arcos y columnas adoptan nuevas formas y tampoco son necesarios ya los arcos arbotantes. También habrá cambios en los materiales.
BARROCO: La arquitectura barroca no renuncia a los elementos clasicistas del renacimiento, pero los ornamenta de tal forma que en ocasiones todo el edificio parece una enorme escultura. A excepción del arco ojival, todo tipo de arcos, bóvedas y cúpulas se pueden dar en estilo barroco.

5. MATERIALES

No supone un elemento claramente diferenciador, puesto que tanto el tipo de piedra utilizada como su talla dependen de factores geográficos y recursos económicos. Unicamente podríamos descartar el estilo prerrománico si las piedras están unidas con argamasa, puesto que el empleo de la argamasa es en general a partir del románico.

También por el tipo de material podríamos identificar el estilo mudejar, cuyo material principal es el ladrillo.

Sillería. El sillar es una piedra labrada por varias de sus caras.
Mampuesto. En cuanto a material se refiere a piedra sin labrar, aunque la palabra tiene también otros usos.
Sillarejo. Sillar más pequeño o labrado más toscamente.
Ladrillo. Piedra de arcilla cocida, generalmente de pequeñas dimensones.
Argamasa. Elemento de unión, puede ser más o menos visible.
A partir del renacimiento se introducen nuevos materiales y nuevas técnicas de labrado, dando como resultado maravillosos sillares con formas redondeadas, bordes suaves y encajes perfectos.

Esperamos que este artículo te ayude a identificar los diferentes estilos de arquitectura religiosa en España, por supuesto, el tema es mucho más complejo y tiene infinidad de matices pero no queríamos escribir un “tochazo” sino una guía práctica. Aquí os dejamos distintos enlaces donde poder ver ejemplos de :

Ejemplos de Barroco

TOMADO DE CULTURIPLAN.COM

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