¿A
quién no le ha pasado? Criticas lo que haces. Te quejas y, sin embargo, acoges.
Protestas pero contribuyes a lo mismo que estás denunciando. Este ejemplo
francamente es gracioso. Pero, en realidad, ¿no puede ocurrir lo mismo con
tantas otras cosas? (cuando nos quejamos de la corrupción, de que la gente no
lee, de que se opina sin estar informados, de que los demás no hacen nada por
los más pobres, de que...) Tal vez sea hora de buscar las pequeñas
incoherencias cotidianas y plantarles cara.
FUENTE: PASTORALSJ.
FUENTE: PASTORALSJ.
No hay comentarios:
Publicar un comentario